Del 23 al 27 de abril hemos celebrado las fiestas del Centro. Comenzamos el 23 coincidiendo con las de la Comunidad de Castilla y León y terminamos el domingo.
Estamos "mataos", empezamos con una exposición y unos aperitivos, seguimos con recital poético, después conferencia sobre El agua. El sábado concurso gastronómico por la mañana y el teatro por la tarde y el domingo la misa en el Val por la mañana seguida de baile y sangría con dulces y los grupos de canto por la tarde.
Para mi lo importante el teatro, entre el lunes y el martes montamos el escenario porque luego ya no podíamos utilizar el salón, se necesitaba para los demás actos. Participamos en todos los actos programados y el viernes por la mañana me dediqué a relajarme y aprovechando que estaban Rosa y Carmen, las hermanas de Fátima nos pasamos la mañana de visita turística por Alcalá. El sábado volvimos a ensayar porque la cosa estaba un poco verde, los nervios por las nubes, ha sido un año especial y nos temíamos lo peor y aunque no fue de las mejores representaciones fuimos capaces de sacarlo adelante que ya es todo un logro, me parece a mi. Las meteduras de pata, una gorda mía, pasaron desapercibidas por el público y un golpe de puerta de Marino fue el toque de humor de la obra que no lo era tanto.
Cuando llegamos a casa el domingo por la noche "no sentíamos las piernas". Ahora a preparar la próxima que es el 7 de junio en la casa del reloj de Madrid.