El primer fin de semana de junio lo pasamos en Villaflor con las labores habituales pero el miércoles 10 nos fuimos a cumplir un deseo que tenía desde hacía mucho tiempo que era visitar La Rioja que no la conocía. Se unieron a mi empeño Fátima y Benito, Fortu y Goyi, y Marino. Alquilamos una casa rural en Santurde y hasta el domingo 14 no paramos. Visitamos por orden de aparición, Santo Domingo de la Calzada, San Millán de la Cogolla; Suso y Yuso. El Monasterio de Nuestra Señora de Valvanera. Nájera, La bodega del Marqués de Riscal en el Ciego, San Vicente de la Sonsierra, Labastida, Laguardia, Haro, Logroño, Valdezcaray, Bañares, El balcón de la Rioja, Antzuola y Soria. Anztuola fue lo más alejado y teníamos un motivo especial para ir, es el pueblo de Fátima y ella quería disfrutar con nosotros de un pueblo que merece la pena visitar.
Coincidimos todos en que habían sido unos días muy agradables, con muy buen ambiente, muy bien aprovechados y con la confirmación de haber recorrido una bonita tierra. Nos llamó mucho la atención la cantidad de viñas que había por todos los sitios que pasamos y el verdor miraras a donde miraras.