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No encontrábamos el momento para juntarnos en Torreiglesia con Pili y José y a final hicimos un hueco y quedamos en dar una vuelta por allí nosotros, ellos con tío Adolfo y Fulgen y Rosa. Los 6 nos juntamos y recorrimos las tierras heredadas de nuestros padres y que casi ni conocíamos, el único que sabe de ello es Fulgen que sigue por allí. Pasamos muy buen día, Fulgen nos llevó un cochinillo asado y con una ensaladilla lo comimos en nuestra casa que fue el lugar elegido al ser la casa de nuestros abuelos comunes, sobretodo la abuela Baudilia a la que todos recordamos con mucho cariño. El tío Adolfo estuvo encantado recorriendo el pueblo que hacía más de 20 años que no visitaba, recordando de su pasado y nosotros encantados en enseñárselo. Hizo un día estupendo y pudimos disfrutar en el campo.
