lunes, 1 de septiembre de 2008

Un poco de las vacaciones


La huerta comenzando las judías

La obra de teatro

La garganta los infiernos

La cueva Pedrones en Torreiglesias

La utilización de los ladrillos

Nos fuimos a Villaflor y desde allí unas cuantas veces a Torreiglesias para ver la obra. Se acabó y aprovechamos para pintar con Juli y Uge e ir colocando las cosas para poder dormir nosotros y que Alberto estuviera un poco más cómodo.
Las fiestas de Villaflor resultaron bien, el teatro salió al fin después de lo poco ensayado, el tiempo acompañó y la paella fue un final más que digno.
De las cosas tristes la visita a Paz, me alegré de verla pero salí hecha polvo.
Con Alberto y Lola hicimos algunos paseitos de los largos que a mi me gustan. Uno de los buenos la visita a Gallegos, ya tradicional, es un paseito de más de tres horas.
A Torrevieja nos fuimos 5 días y nos acompañaron Carmen e Isabelino. Nos llevamos a Marina que fue lo mejor del viaje. Disfrutamos mucho con ella, se portó muy bien y se lo pasó estupendamente.
Al regreso de la playa nos fuimos a recorrer el Valle del Tietar y el del Jerte. Dormimos en Garganta la Olla y recorrimos un montón de pueblos de lo más bonitos. El paisaje es increíble y nos hizo muchísima calor. Estos pueblos tienen todos unas piscinas naturales estupendas y nos aprovechamos para refrescarnos siempre que pudimos. De lo mejor el recorrido por la Garganta de los infiernos para llegar a los pilones, nos bañamos en un lugar insólito. El paraje natural es precioso. Al volver seguimos con nuestros paseos y esta vez fuimos a Bularros.
El sábado 6 de agosto era la cena fría en Torreiglesias y nos llevamos a Alberto y a Lola para allá, hicimos un recorrido por el Soto, otras tres horas de caminata que a mi me resultaron de lujo, fuimos por el camino "las cabras" y volvimos por la "encina gorda" la cena era en la plaza a base de embutido, empanada y queso, regado con sangría. Nos lo cenamos sin rechistar y nos volvimos a Villaflor, la casa no reunía las condiciones para invitados.
Otra tarde cenamos en Avila, también con Alberto y Lola, era la despedida porque ellos se iban a Laredo, así que nos quedamos como abandonados. Hubo suerte porque a Marino le sirvieron unos ladrillos que llevaba toda las vacaciones intentado que se los mandaran para hacer una valla en la huerta y con eso nos entretuvimos un montón.
Ahora tocaba las fiestas de Torreiglesias y allí si que hizo frío de verdad, todos los días, no se salvó ni uno, de todos modos estuvimos agusto y lo pasamos bien, comimos el día de la fiesta con José Manuel y Emilio, Juli y Uge y nosotros en casa de José Manuel y resultó tan agradable como siempre.
Ya nos quedaba poco de las vacaciones y volvimos a Villaflor con la ilusión de encontrar tomates maduros que no habíamos podido probarlos este año, pero resultó inútil, seguían verdes y se quedadon en las parras para otra semana más.
El domingo aparecieron Fortu y Goyi a hacernos una visita y nos hizo mucha ilusión, era el primer día que hacía una temperatura agradable por la noche después de muchas de frío.